CUANDO LA CENICIENTA ENCONTRÓ A SU PRÍNCIPE... : ROMANTICISMO Y ELEGANCIA EN UNA BODA CON NOTAS CLÁSICAS.

Cuando Bárbara conoció a Daniel pensó que era lo que siempre había buscado y que no iba a dejarle escapar.. Muchos años esperando y por fin llegó el hombre de su vida.

Cuando Daniel conoció a Bárbara pensó que era la chica mas bonita del mundo y el dia que le pidió matrimonio bajo la torre Eiffel, pensó que solo quería estar con ella.

La boda que tanto habían soñado, se iba a hacer realidad y por supuesto no querían dejar nada al azar. Los detalles tenían que estar cuidados y todo tenía que ser tan romántico como había sido su historia de amor, por lo tanto cuando les conocimos lo unico que nos pidieron era que  ese romanticismo se viera reflejado el día de su boda.


En la elección del vestido de novia se tuvo en cuenta el gusto y personalidad de la novia y la idea de boda elegida para ellos, una boda  romántica, con detalles clásicos y distinguidos. Se optó por un vestido de Rosa Clará en triple organza de seda, con detalles de vainica , falda con volumen y mucho movimiento, con bolero de encaje chantillie francés en escote barco, consigiendo asi una imagen con muchísima dulzura. El peinado, moño italiano con toques muy retro años 50 y el maquillaje fueron realizados por Adoración Márquez, estilista y amiga íntima de la novia.

El enlace se celebró en Avila, en la Basílica de San Vicente que se encuentra en el casco antiguo de Ávila, en el interior de la muralla,  evocando gracias al entorno, aires de otra época y el romanticismo de cuento buscados, que hizo que todo fuera idílico. La entrada de la novia fue acompañada con  el maravilloso y emotivo Ave Maria de Schubert.

  

 La localización del espacio para la celebración del banquete y la fiesta, exigía un espacio que te llevara a imaginar otros tiempos, que despertara emociones y que reflejara la personalidad de los novios, con rincones llenos de delicadeza y puro romanticismo: Palacio de los Velada. Las notas clásicas , sin estridencias y los colores suaves y serenos en la decoración y ambientación del entorno y las mesas crearon la elegancia y distinción deseadas por la pareja.

Detalles especiales y personalizados como las invitaciones de boda, realizadas en azulsahara, cuyo estilo y presentación no pueden ser más exquisitos y delicados, un apetecible buffet de dulces para los paladares más golosos, situado en la parte exterior del espacio para la fiesta y el baile, y un gracioso arbol de los deseos en lugar del tradicional libro de firmas para dar los mejores deseos a los novios, dieron a esta boda clásica las pinceladas de color y originalidad.

Ha sido un verdadero placer para nosotrosconocer a una pareja con tanta complicidad y con un gusto tan exquisito y elegante.


     Leticia González & Almudena Rodríguez
     Divinity Wedding Planners